Una luz nocturna para bebé, también llamada luz quitamiedos, es lo ideal si quieres que tu hijo se sienta acompañado durante el sueño. Hay muchos modelos, y la mayoría bastante relajantes, pero no está de más estudiar las ventajas y desventajas de cada uno.
Las 5 Mejores Luces nocturnas para bebés: Comparativa
Table could not be displayed.La Mejor: Luz Nocturna Infantil VAVA
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Ventajas
- Hecha con material gomoso, para evitar que el bebé pueda romperla.
- La luz es bastante tenue, y los colores bonitos.
- Es simple pero robusta.
- Se enciende con un solo toque.
Desventajas
- Estaría bien que se pudiese desactivar el LED parpadeante nocturno.
La Más Divertida: YISSVIC Luz quitamiedos de bebé Multicolor
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Ventajas
- Precio.
- Incluye un modo sueño, para que la intensidad disminuya al dormir.
- El material estimula el tacto del bebé.
- Muchas funciones y formas de uso.
Desventajas
- Durante la carga no se puede utilizar.
La más barata: Luz OMERIL
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Ventajas
- Precio.
- Con luz suficiente para cambiar pañales sin despertar al bebé.
- Bajísimo consumo de energía.
- Viene también con mando a distancia.
Desventajas
- Sería más funcional poder encender la luz de varias formas.
Lámpara Nocturna Bebé LED YISSVIC Pollito
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Ventajas
- Iluminación bastante tenue y agradable.
- Forma muy divertida.
- Es de bastante calidad.
Desventajas
- La batería podría durar un pelín más.
BRUNOKO
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Ventajas
- Es muy bonita y agradable al tacto.
- La batería es bastante buena.
Desventajas
- Podría venir con encendido automático.
¿Cómo elegir una luz quitamiedos de bebé?
Todas las luces de esta comparativa son bastante potentes, y cualquiera puede serte útil. Sin embargo, si tienes dudas sobre qué luz nocturna comprar para tu bebé, estos son los factores que debes considerar antes de nada:
Diseño
El diseño de la lámpara determinará cuánto espacio podrá cubrir y hasta qué punto le va a gustar al bebé. Por lo general, cuanto más llamativo más va a atraer la atención del bebé. Piensa que al principio, mientras es recién nacido apenas le va a hacer caso, pero conforme crezca se irá fijando más en la luz.
Respecto al espacio, no es lo mismo una luz de enchufe que una que pueda colocarse en el centro de la habitación. Si es de enchufe debes tener en cuenta que necesitará más potencia para llegar a cualquier sitio del cuarto, mientras que si es inalámbrica no necesitarás tanta potencia dado que podrás colocarla donde realmente la necesites.
Número de colores disponibles
Los colores no son algo imprescindible pero sí importante. A los niños les gustan más unos colores que otros, son algo que les atrae y les deja encandilados. El azul, por ejemplo, es un color que funciona muy bien en los bebés, no se sabe por qué pero hay estudios que indican que genera un efecto relax en los bebés. Y lo mismo sucede con el verde.
Seguridad del material
La lámpara nocturna va a ser algo que va a estar siempre cerca de tu bebé, y por eso es importante que sea completamente segura. Debe ser robusta, de modo que no pueda ni desmontarse ni romperse con facilidad, pues de lo contrario podría llevársela a la boca. En este sentido, los mejores materiales son la silicona, o en su defecto, el polipropileno.
Consejos para utilizar una luz nocturna para bebé
Las luces nocturnas para bebés se han vuelto cada vez más populares, para usarlas de forma correcta te damos algunos consejos:
- Coloca la luz en la habitación del bebé, pero en un lugar estratégico. Esta debe estar en el punto de la habitación con mayor oscuridad y no tan cerca del pequeño. Entre más alejada esté mucho mejor.
- La intensidad de la luz nocturna no debe ser tan alta. La función principal de estas es hacer que tu bebé pueda dormir con mayor facilidad, una luz muy fuerte podría afectar el sueño del bebé.
- El tipo de luz debe ser cálida con tonos rojizos o amarillos. Las luces de noche con tonos fríos como el azul no son del todo recomendables.
- No todos los bebés necesitan luces nocturnas. Este tipo de luces no es un elemento decorativo, si tu hijo puede dormir sin ella no necesitarás comprarla, solo se usa en casos específicos.
- Lo correcto es que se utilice la luz cuando el bebé comience a crecer y no antes. Si tu hijo ha desarrollado temor a la oscuridad y no quiere dormir solo en su habitación porque está acostumbrado a dormir contigo puede ser buena idea utilizar la luz, antes no.
